Systema Solar: La cultura del picó
Entrevista a Systema Solar sobre la cultura del picó, que se destaca con frecuencia en la música y en la estética del colectivo. Explican: “Es un equipo de sonido con personalidad… es patrimonio del Gran Caribe”.
Preguntas para guiar la lectura
- ¿Qué es un picó?
- ¿Por qué lo consideran como “patrimonio del Gran Caribe”?
- ¿Cómo es la estética de los picós?
- ¿Cómo promueven los picós el emprendimiento y la economía local?
- ¿Qué sonidos se escuchan en los picós?
Transcripción
Yo vengo del picó urbano, del picó de la ciudad, que es el sound system de techno y de rave. Y esa es una interpretación de un picó, de un sound system. Y luego está el picó, la palabra picó ya viene de esa cultura del sound system del Caribe colombiano. Y, bueno, Walter está muy impregnado en el picó y nos va a contar más de eso.
Bueno, vamos a hacerlo así didácticamente. Usted me va a recordar su nombre. [Zacarías] Ok, un picó es como si tú tuvieras un equipo de sonido que le pusieras tu nombre y dirías así: “¡Yo soy Zacarías ultrasonoro y conmigo van a disfrutar los mejores sonidos musicales!”. [risas] Es un equipo de sonido con personalidad.
Quedó una buena plaka. Eso se llama una plaka. Sí, eso se llama una plaka, un audiologo de tu picó. Exacto. Nosotros tenemos una que dice: “Desde la zona estelar berbenáutica, con ustedes: Systema Solar”. Claro, un audiologo.
Systema Solar – Plaka/Bienvenidos
Desde la zona estelar berbenáutica, con ustedes: el Systema Solar
Claro, el picó es eso. Es un equipo de sonido que es patrimonio del Gran Caribe, o sea, no solo es de Colombia. En Jamaica hay picó, en Trinidad y Tobago hay picó, en México hay picó, solo que no le llaman de la misma manera, pero es la misma lógica. Es un equipo que es esencialmente social. Es para hacer la fiesta del barrio en el que tú te encuentras con tus vecinos, conoces gente nueva, vas a bailar y vas a disfrutar mucha música. Sí, en diferentes lugares le llaman diferentes nombres. En Venezuela le dicen el turbo. En República Dominicana creo que le dicen picoley. Bueno, tu sound system, pero básicamente es la misma esencia. También el ghetto blaster, que es la versión portátil. Sí, claro.
[También tiene una estética picotera. ¿Cómo es?]
Es parte de su personalidad. Es investir como su personalidad lo indica. El equipo de sonido tienes que investirlo de una conexión visual para que llame la atención y para que se conecte también desde el color, desde la textura, con eso que también puedes disfrutar por tus oídos. Entonces, hay mucha iridiscencia, mucha florescencia, magnanimidad en la imagen. Es un juego de mucho color.
“Hay mucha iridiscencia, mucha florescencia… mucho color”, como este picó del video de “Yo voy ganao”
Tiene en sí toda una gran tradición de artistas. Son famiempresas. Mucha creatividad vinculada a toda esa experiencia, a esa tradición. Ya es una tradición. Entonces, hay pintores que son exclusivos, que saben que esos son los que pueden darle esa sabrosura a esa imagen. Y hay quienes los construyen y esa es la ingeniería de sonido llevada a unas prioridades en el decibel, en el énfasis en algunas frecuencias. Es un patrimonio del Caribe, o sea, no hay un equipo así que se llama Sony. [risas] Ellos no lo han hecho, aunque de pronto si lo quieren, lo hacen, pero los caribeños los hicieron primero. Cogieron sus parlantes y los armaron a prioridad del Caribe.
[¿Y cómo promueve la economía local esta cultura?]
Esencialmente, exacto. Son famiempresas. Generan empleos directos porque es una atropía, ¿no? Está la familia, están quienes hacen el picó. Están quienes hacen la fiesta, que es la verbana. Están quienes venden la música y la promueven y la promocionan. Sí, es una cadena. Es un negocio.
Es un negocio que ayuda a promover a las sonoridades del lugar y también lo que nos ayuda mucho a nosotros es que también trae sonidos para conocer y esos nos inspiran. Por eso en el Caribe colombiano se escucha música del Congo, de Kenia, de Sudáfrica, que la radio luego copia y también ellos sacan al aire porque primero lo escucharon en el picó. Porque hay una forma de hacerlo. Es que buscan la exclusividad: “Esta canción la bailas solo aquí, nadie más la tiene”.
Bueno, un saludo especial a Zambombazo. ¡Eso! ¡Zambombazo! ¡Eso va!