Entrevista: Fabrikante – Chanteoma
Canción: Fabrikante – Chanteoma
País: Ecuador
Género: Beatbox, Hiphop
Temas: Ideologías sobre la cultura (homogénea vs. alternativa, globalizada vs. local), El proyecto La Licuadora, El movimiento cultural de Guayaquil, El poder creativo del lenguaje
Entrevista a Fabrikante
¿Qué es “Chanteoma”? ¿Nos ayudas a entender un poco el significado de la letra de esta canción?
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Es una palabra que inventé. No tiene un significado tan definido y concreto como de diccionario, pero es algo que existe. Toda la letra de la canción trata de describir el significado de esta palabra.
Veo que la canción abre con una mención a “una tendencia muy conocida…” y que termina con “una tendencia desconocida”, entonces esta tendencia tiene que ser clave para entender la canción. ¿A qué tendencia se refiere?
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La tendencia conocida y desconocida es la misma: chanteoma. Hay como dos polos opuestos. En una esquina del ring está el desierto, las personas que se limitan a vegetar. En la otra esquina del ring están los que ruegan “para que la sinfonía no se apague”. Los que tratan de crear algo, tratan de dialogar con el mundo, de no encerrarse. Es una guerra como te podrás imaginar. Por ahí va la idea de chanteoma.
Cuéntanos de este fascinante videoclip y de su director, Machalo.
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Machalo ha hecho videos hace muchos años. Creo que algo que caracteriza mucho su obra visual es el ritmo y la experimentación. No es la primera vez que colaboramos en un video juntos. Hace tiempo filmó un video de Parafërnalia, una banda instrumental donde yo hacía percusiones y voces. También hizo una filmación en vivo de mi canción Calandracas para un programa de televisión llamado El Alternador en el cual Machalo trabaja. Machalo tiene una creatividad espontánea y el videoclip Chanteoma se empezó a filmar con una idea de más o menos cómo sería, pero cambió muchas veces a medida que lo filmábamos. Machalo lanzaba ideas y ahí veíamos si eran viables y si quedaban con el video.
Parece que has trabajado con una amplia variedad de medios artísticos. Por ejemplo, vimos que también eres ilustrador y director de la revista La Licuadora. ¿Nos describes tu trabajo allí? ¿Cuál es el objetivo de esta revista?
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En La Licuadora soy el Director Editorial. La revista está dirigida a chicos de colegio, nuestro objetivo es ser una especie de resistencia ante tanta chismografía gringa que inyectan los medios tradicionales en los chicos. La revista es como una sala donde los chicos pueden enterarse que hay muchas puertas más de las que los centros comerciales ofrecen. En la revista se pueden enterar básicamente de las propuestas artísticas, musicales y literarias del medio local e internacional. También es un espacio para que los chicos de colegio puedan enviar sus dibujos y textos para que sean publicados y que su voz de cierta forma tenga un lugar para amplificarse. Es una lucha difícil, de hecho, no creo que ganemos, pero de eso se trata la esperanza real, no necesita defenderse lógicamente.
¡Felicidades por el primer aniversario de la Licuadora! ¡Qué buen documental también! En particular, nos gustó el comentario de Lola Duchamp: “Hicimos la revista que nosotros hubiéramos querido tener en el colegio… alguien me dijo que es una revista para niños raros y es un poco así, para que el niño raro de la clase tenga un espacio…” ¿Eras el niño raro de la clase? ¿Cómo habría sido diferente tu educación si hubiera existido esta revista en ese entonces?
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Realmente fui un chico muy normal, pero nunca me sentí cómodo con los gustos de los demás. No me gustaban esas fiestas donde escuchabas música mediocre. Pensaba que no me gustaba bailar, pero después entendí que era la música que no me transmitía las ganas de bailar. Fui un chico muy solitario en el colegio, pero no me buscaba problemas con nadie por eso les caía muy bien a todos. Mis gustos los formaba basándome en la televisión, eran bandas casi todas de EE.UU. y pensaba que era un castigo vivir en este país, que era un desierto y que lo mejor era irse a vivir allá. Al ir creciendo descubrí dos cosas:
En primer lugar me di cuenta que los gustos que yo había tenido en el colegio muchas veces eran los hijos de algo que no había sido tan famoso y que tenía una mejor calidad estética. En segundo lugar, descubrí que existían tantos exponentes de gran nivel tan cerca mío, no sólo en la música, sino en las artes visuales y la literatura.
Me dio frustración no haberlos podido conocer tiempo atrás, porque definitivamente mi desarrollo intelectual hubiera sido mucho mayor y en lugar de consumir tanta cosa prefabricada. ¿Por qué no los conocí? Porque los medios de comunicación rara vez mostraban algo de calidad, peor aún algo local. Es un problema muy grave en mi país y que todavía tiene vigencia. Por ejemplo, el 2012 muchas bandas sacaron discos o videoclips de gran calidad, pero ¿qué es lo que vimos en la primera plana de la sección de cultura de los diarios de mi país? El Gangnam Syle y varias veces… No está mal el Gangnam Style, pero siendo objetivos, dentro de nuestro país y el mundo hay música de mejor calidad, pero los medios masivos prefieren mostrar productos mediocres lo cual hace más difícil que la gente se entere de los productos de calidad. En fin, un medio alternativo creo que puede hacer crecer la mente de algunas personas (no todas) para que dejen de ser solo mamíferos reproduciéndose sin cesar y que vean que hay más puertas aparte de las obvias.
¿Cómo es el movimiento músico/artístico/literario de Guayaquil? ¿Con qué otros artistas/autores has trabajado? O, ¿qué artistas nos recomiendas? ¿Algunas personas que debemos seguir en Twitter?
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Es muy rico este movimiento. Realmente sería una lista muy larga, pero les recomiendo que sigan a Plan Arteria para enterarse de lo referente a música y que lean un suplemento cultural llamado Cartón Piedra (circula de manera impresa con El Telégrafo, pero creo que se puede bajar por internet), para enterarse de noticias literarias y artísticas de calidad:
Cartón Piedra: @cartoNPiedraET
Plan Arteria: @planarteria
Nos dijiste que piensas dedicarte más a la música. ¿Qué planes tienes para el 2013?
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Lanzar mi disco Memoria y profecía de Doña Petita Pontón, hacer una gira en todo el mundo y hacerme millonario para tener los medios para hacer una campaña que logre convencer al resto del mundo que la sociedad de consumo tiene como objetivo reducir nuestra imaginación (así el deseo de libertad es realmente minúsculo, si los dejan comprar y ver televisión se sienten libres) y el deseo de socializar con el otro y que nos obliga a sólo aceptar a los que son iguales a nosotros (mamíferos reproduciéndose y comprando sin cesar) haciendo de nosotros una sociedad plana.